10.5.10

Cutter-bisturí

Debido al proyecto nuevo del que llevo hablando hace unas cuantas entradas pero del que todavía no puedo decir más -hmmm, parezco una actriz famosa intentando no desvelar el argumento de su próximo peliculón- he necesitado una herramienta que conocía pero de la que ignoraba el nombre:

cutter bisturí

Es decir, esto:

Investigando por la Gran Red de Redes descubrí cómo se llamaba pero no tenía tan claro dónde encontrarla.
Me daba a mi que era ese tipo de artilugios que por sentido común debería estar en muchos tipos de establecimiento pero que luego iba a hacerse de rogar.

Y así fue.

Una tarde de viernes, fuimos Pelotillo y yo al centro de Madrid, a comer y  para hacer otras compras pero teniendo como leit motiv el artilugio en cuestión. A falta de papelerías técnicas a mano y de otras tiendas dedicadas a la venta de productos de manualidades cerca visitamos unos conocidos grandes almacenes y nada. Lo único que tenían era el cutter de toda la vida y material casi infantil.

De vuelta a casa y con los brazos colgando de la desilusión se me ocurrió que en una tienda regentada por chinos* en nuestro barrio que es bastante grande podrían tenerlo.

Pelotillo, ocurrente él como es habitual, insistió en que de camino a la susodicha  visitáramos otras tiendas similares, con la intuición de que íbamos a tener suerte.

No la hubo pero nos íbamos acercando. Siguiendo sus instintos de animal comprador nos metimos en una tienda-kiosco de prensa-de todo un poco pero no regentada por un chino, no, si no por un señor que a mi siempre me recuerda a Christopher Lee pero en joven. 
Hasta que habla, claro, porque es un poco coleguilla y tiene esa forma de hablar del típico gato madrileño. Ni qué decir tiene que es un tío majo y  como tal estuvo rebuscando entre su stock pero lo que le quedaba era un pack de cutter bisturí y otras herramientas que no necesitaba en absoluto así que tuvimos que dejarlo.

Aprovechando el camino a recorrer visitamos la tienda de pinturas donde pedimos la carta de color para elegir cómo dejar las habitaciones que faltan por pintar en casa -algo que por cierto ya hemos empezado a hacer pero esto será tema para otro día-, movidos por un razonamiento extraño que nos llevó a pensar que como tenía artículos de brocha fina además de la gorda, que podría tener algún adminículo relacionado con las bellas artes menores.

Entramos. Nuestro hombre estaba al fondo de la tienda limpiando y se volvió con expresión de llevo una tarde en que no he intercamabiado sonido humano con ningún congénere lo que a mi ya me hizo sospechar.

-Hola, ¿tienes cutter-bisturí?
-¿El qué?
-Cutter-bisturí.
-....

Silencio.

-...Eeeeee. Noooo.
-Vaya.
-¿Has probado en una farmacia?

- ¡¡¡¡¡¿¿¿¿?????!!!!!

Pelotillo permaneció callado. Yo, trataba de entender el silogismo y descubrí que no era tal, que simplemente debió de relacionar conceptos al azar y como yo había dicho bisturí pues se le ocurrió farmacia pero aquello no era Pasapalabra, aunque hay que agradecerle la buena intención, pobre hombre.

Una vez que conseguí tragarme la perplejidad inicial le expliqué intentando que no quedara como un idiota. Deformación profesional.

-Eee...Pues no, pero es que es como un cutter pero el mango es cilíndrico y metálico y no tiene pestaña para deslizar la hoja; es más bien para manualidades y bueno, como llevamos un buen rato visitando tiendas por el barrio pues se nos ha ocurrido aquí...peeero...eeee...no hay problema...seguiremos buscando...


Llegamos a la tienda regentada por chinos y allí estaba: un resplandeciente cutter bisturí con 4 cuchillas de diferentes formas y grosores, engrasadas.
A 90 céntimos.

Pelotillo, la próxima vez descartamos primero nuestra gran tienda  al ladito de casa y si quieres luego entramos a la de pinturas a preguntar cualquier cosa para seguir escribiendo en el blog.



*Es muy habitual decir tienda de chinos y de hecho es una expresión que yo uso cuando hablo pero verlo escrito parece que se trate de una tienda donde tienen los chinos colgando como jamones para que elijas el que más te guste, de ahí el remilgo de mi expresión.

1 comentario:

  1. Me ha pasado con otros productos y también lo encontré en un chino gigante de esos que venden desde collares para perros hasta juegos de sábanas pasando por maquillaje y artículos para el coche xD.

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